Mi nombre es Nalah Patricia Villegas Litvac, soy una “Salchigua” presuntamente, tengo cuatro meses de edad, para quien no sabe que raza es un salchigua, es la combinación de un salchicha con un chigua gua, vivo en Cagua con mis papis y mis abuelitos.
Según mi mami no me porto muy bien que digamos, mi papi tiene la misma opinión, para mis abuelitos, soy una “santa”, (ellos son los únicos que me entienden), a pesar de hacer todo lo que ellos me piden, estemmmm bueno casi todo para ser más honesta , muchas veces me regañan.
Hay varios crímenes de los que se me imputan y de todos hay pruebas o testigos que me incriminan, yo solo pienso en defenderme y por eso les doy mi explicación y mi versión de cómo y porque ocurrieron los hechos.
Cuando era más chiquita, ósea hace un mes, mi papa dejo en la cama un corotico que suena mucho, un juguete extraño, que tiene muchas letras y donde hay una foto de mi familia, yo le quise dar un besito, pero como era muy pequeña y se me resbalaba lo mordí un poco para que no se me cayera y se dañara, solo que cuando lo hice mis dientes quedaron marcados, así que lo deje en la camita y baje con mi mami, pero él se dio cuenta que fui yo, el bajar corriendo y hacerme la dormida, no funciono mucho.
A mi papi no le causó mucha gracia, y me prometió convertirme en “pincho”, pero yo sé que lo dijo en juego, ya que él me quiere mucho, y yo lo sé porque me deja darle muchos besitos, y acostarme con él en la cama (la cama grande que es mía también).
Hago tanto caso que el hacer pipí en el periódico es una de las cosas que hago con más frecuencia, solo que a veces no tomo en cuenta el lugar donde está el periódico, y cuando subí a la cama de mis abuelitos pensé que ellos lo habían puesto allí para mí, cuando vi sus caras mientras hacía mis necesidades fisiológicas me di cuenta que no era para mí, pero no dijeron nada, porque en todo caso, use “el periódico”.
Me comí el “niño Jesús” o eso es lo que dice mi vieja, resulta que un sábado decidieron pasear sin mí, hasta mi buelito salió de la casa, cosa que nunca hace, pero me dejo una cartita bien linda con unos papelitos de colores verdes, habían muchos, tenían pintados unos señores y todos eran iguales, yo me lleve el paquetito para la cama grande y decidí ver a que sabor tenían los papelitos, porque aún no se leer.
A mi papi le toco hacerle un regalo igual a mi buelito, y allí fue cuando me dijeron que me había comido “el niño Jesús”, ahora pregunto, ¿Sera que esos papelitos a los que ellos llaman billetes son el famoso niño Jesús?, o es que no era para mí el regalito?
Ese mismo día, “el día que me abandonaron”, quería darle una sorpresa a mi buelita, asi que me sente en una de las sillas de la sala y rompí un palito que estaba atravesado, claro esto también tiene su razón, así mis papitos la mandan a arreglar y se la traen como nueva a mi buelita, pero para que una silla no se viera más nueva que la otra decidí hacerlo a las dos, en enero mi buelita tendrá dos sillas como nuevas.
Mi mami, que en vez de Nalah me va a cambiar el nombre por NOOO lah , asegura que me va a poner a ver una película llamada #Toy Story” para que aprenda a cuidar mis juguetes, porque según ella yo soy una destructora, mi confusión es, ¿no son los juguetes para morderlos y jugar con ellos hasta sacarle todo lo que tienen dentro?, si si, acepto, fui muy ruda con “Simba” no debí sacarle las tripas, ni sacarle el ojo a “mini me”, pero ellos se lo buscaron, no se defendieron en ningún momento. Además fue Simba el que le fue con el cuento de las sillas a mis papis, porque era el único que estaba conmigo.
Yo me declaro inocente, y si hice algo malo, pues perdónenme, sigo queriéndolos más que nada en el mundo, solo quiero que me amen, y seguir llenando de sonrisas cada uno de sus minutos, prometo que no será lo único que hare, faltan muchas cosas por romper, habrá muchos “No!!! Que retumbaran las paredes, y más de una vez me querrán ver volar, o hacer pincho (como dice mi papa) pero ustedes son lo más grande que tengo, y los llenare de besitos y naricitas frias…
Los quiere Nalah Patricia